Pedagogías activas

La pedagogías activas se llevan aplicando durante décadas y son la mejor forma de que alumnos y alumnas adquieran competencias contextos reales de aprendizaje.

En Osotu este trabajo de investigación, puesta en común, decisión, ejecución y presentación no se limita a una materia o a un proyecto. Las pedagogías activas forman parte de nuestro modelo y se utilizan en todas la materias, en todos los contextos y en todos los aprendizajes.

Suponen un cambio de paradiigma educativo en el que el pupitre individual, el aula cerrada, la clase magistral, la repetición de ejercicios simplemente no tienen cabida. 

En Osotu se adquieren las competencias del currículum vasco de educación en talleres, proyectos y rincones, investigando, saliendo al exterior para observar los procesos naturales y sociales, llevando a cabo tareas de la vida real y trabajando de forma cooperativa con otros niños y niñas.

Aprender haciendo

Learning By Doing o “aprender haciendo” permite que el alumnado aprenda contenidos a la vez que desarrolla sus competencias. Todo ello en contextos reales de aprendizaje que le dan sentido a lo que aprenden y les capacita para transferirlo a otras realidades.

Hoy en día, adquirir conocimientos y no saber cómo utilizarlos es absolutamente ineficaz. Al alcance de cualquiera está toda la información que podamos necesitar. La persona competentes la que sabe cómo utilizar esos conocimientos para resolver situaciones nuevas .

Este tipo de trabajo hace que el alumnado tenga un mayor control de su aprendizaje y le permite integrar el movimiento, la discusión y el debate. Todo esto fomenta un aprendizaje significativo que perdura en el tiempo.

El proyecto educativo de Osotu tiene como uno de sus ejes pricipales el paradigma de las inteligencias múltiples. Gracias a Howard Garner, hace décadas que sabemos que la inteligencia se expresa de diferentes maneras.

No se trata tanto de tener mucho conocimiento sobre algo, sino de la capacidad de transferir conocimientos previos a otros ámbitos y utilizar todos nuestros recursos para crear distintas soluciones al mismo problema. Centrar todo el aprendizaje en uno o dos aspectos de la inteligencia (logico-matemática, lingüística) es un error.

En Osotu desarrollamos todas las inteligencias y acompañamos a cada niño y niña para que encuentre dónde es fuerte y esto le permita crecer de forma plena.

La capacidad trabajar en equipo es uno de los requisitos más demandados por el mercado de trabajo actual. Sin embargo todavía tendemos a trabajar de forma individual y competitiva. En Osotu el aprendizaje cooperativo  es uno de los pilares de nuestra propuesta por tres razones básicas:

 • El resultado final de un trabajo cooperativo es mucho más completo y tiene mucha más calidad que los trabajos hechos por una sola persona. El aporte de varias mentes trabajando con un mismo objetivo es enriquecedor en todos los sentidos y más eficiente.

 • En segundo lugar, el conocimiento se comparte en el trabajo cooperativo; por tanto, generamos una inteligencia colectiva, lo que, desde todos los puntos de vista, es muy positivo; todos los miembros del grupo comparten y se nutren de esos conocimientos.

 • Por último, el aprendizaje es mucho más profundo y duradero, ya que el grupo no sólo escucha, sino que también explica, argumenta y reflexiona.

 

“Sobre todo aprendemos con otros y de otros”

José Ramón Gamo

 

Como vemos el trabajo cooperativo, estructurado y guiado es fundamental, pero para poderle sacar todo el partido, es necesario un profundo trabajo emocional con el alumnado. En Osotu ponemos especial énfasis en la cohesión del grupo y el respeto, para que cada persona pueda aportar al grupo y sea una pieza imprescindible del mismo.

Aprendizaje significativo

Dentro de la cultura del pensamiento se promueve el aprendizaje de estrategias y hábitos que fomenten el pensamiento humano. 

El pensamiento crítico es la capacidad de cuestionar y ofrecer alternativas a las verdades que creemos inmutables. Estamos hablando de procesos de razonamiento que no se frenan en el mero aprendizaje, sino que van más allá, cuestionando los datos hasta verificar su veracidad.

El pensamiento creativo nos permite procesos cognitivos que nos llevan a encontrar soluciones diferentes a un mismo problema. Esa flexibilidad de pensamiento nos facilita la adaptación a nuevos contextos y aumenta nuestra capacidad para elaborar nuevas hipótesis y salidas ante un nuevo reto.

Nos guiamos por los principios y técnicas de referentes como Robert Schwarz, David Perkins o Angélica Sátiro.

Evaluación formativa

Esto significa que  todos los métodos de evaluación en Osotu, incluidos los exámenes -cuando los haya-, no están enfocados a poner una nota, sino a detectar qué partes del aprendizaje no han quedado perfectamente fijadas y qué competencias no se han adquirido adecuadamente o conviene mejorar.

A partir de aquí, se trazará un perfil de mejora personal, que en cada caso será diferente para cada niño y niña. Un trabajo que se realizará en el aula con el acompañamiento de nuestro profesorado, que comparte toda la información de manera trasversal, de forma que se pueda aplicar en todos los contextos de aprendizaje, en todas la materias y con todas las y los docentes que trabajen con cada niño y niña.

En Osotu no basamos la educación en lo que no saben o en lo que no hacen. En Osotu la enseñanza se basa en las fortalezas de cada niño y niña (que en cada caso son diferentes) para construir y mejorar a partir de esa confianza. No saber es normal, lo realmente importate es que se sientan valorados y valoradas para creer en sí mismos y se crean competentes para adquirir los conocimientos en los que no son tan fuertes. 

Ese es nuestro trabajo en Osotu: no resaltar sus fallos, sino sus virtudes, para empezar a contruir y usar el error como un elemento más dentro de ese proceso.

Si el fallo se castiga, no me arriesgaré. Si tengo miedo a equivocarme, no puedo aprender. Si no se integra el errror en el aprendizaje como un paso imprescindible para la mejora, nuestra enseñanaza será pobre y nuestros resultados mediocres.

En Osotu vamos a utilizar la evaluación formativa tal y como indica la ley vasca de educación, es decir, que la calificación no se obtiene hasta el final de un proceso de aprendizaje. Mientras tanto, la evaluación se utiliza como forma de detectar puntos de mejora.

Repetición de curso

La repetición es una forma clásica de adecuación del sistema para un problema de aprendizaje, y no es un buen sistema. Ni para el alumnado, ni para los resultados educativos. Supone un duro golpe para la autoestima y sabemos que la autopercepción del propio alumnado sobre sus capacidades es uno de los factores más importantes para el éxito educativo (Poy 2009). Además, repetir curso aumenta por 20 las posibilidades de obtener muy bajas calificaciones en pruebas diagnosticas a la edad de 15 años.

La ley Vasca de educación Heziberri 2020 afirma tajantemente que se precisala eliminación de la repetición como método ordinario de recuperación y de las reválidas hasta la entrada a los estudios superiores, así como la apuesta por una educación comprensiva hasta la finalización de la educación básica y obligatoria“ (pág. 43).

La OCDE, en su informe Diez pasos hacia la equidad de la educación, (pág, 5) afirma que "Hacer que los alumnos repitan el año si no mantienen el nivel del curso es una opción popular; en algunos sistemas escolares hasta una cuarta parte de los alumnos repite año en algún momento dado. Pero es costoso y hay pocas pruebas de que los niños se beneficien al hacerlo" 

En Osotu la repetición de curso no es el método ordinario de adecuación, salvo en casos muy concretos y tras un profundo análisis, tanto académico como psicopedagógico. En esos casos en Osotu aplicamos medidas específicas de refuerzo en las áreas que cada alumno y alumna precisa. 

En Osotu estamos comprometidas con sacar lo mejor de nuestros niños y niñas, y creemos, tal y como afirma el marco educativo vasco, que hay que evitar la repetición como recurso ordinario.

¿Por qué nuestros hijos e hijas tienen tantos deberes? ¿Es normal que, cursando primaria, pasen tanto tiempo en casa rellenado fichas y solucionado problemas? Cuando la repetición y memorización son las únicas vías de acceso a los contenidos, los deberes son necesarios para fijar los conocimientos.

Pero como afirma Andreas Schleicher, director de Educación de la OCDE, «Los deberes son una herramienta muy importante para ayudar a los alumnos a ser independientes, pero no deberían ser una réplica de lo que se hace en el colegio»

Los deberes no deben reproducir lo que se ha dado en clase, sino una práctica diferente y autónoma. La tareas para casa en Osotu tienen que ver con la investigación y la profundización, no con la repetición.

En Osotu hablamos de aprendizaje significativo. A través de una didáctica diferente podemos lograr que el acceso a los conocimientos se produzca sin tener que recurrir constantemente a la repetición. Hay múltiples ejemplos educativos de éxito y reconocidos internacionalmente. De hecho, una educación no basada en la repetición es no sólo posible, sino deseable.

Eso no significa que los niños y niñas nunca vayan a tener tareas que deban desarrollar en casa. Pero en Osotu la mayor parte del trabajo se hará en las horas de colegio, que son muchas y más que suficientes. Por dar un ejemplo, Euskadi  tiene en primaria y secundaria 200 horas lectivas más que Finlandia.